Enseñar una flor y sonreír, el origen del Chan (Zen)
La palabra “chan” es la transcripción que viene del sanscrito “dhyana” y que quiere decir “pensar en quietud” o “reparar los pensamientos”.
Existen varias historias acerca del origen del Budismo Chan (zen). Una de ellas nos lleva a la antigua India y dice que un día el Gran rey Brahma envió una flor udumbara hecha de oro al fundador del budismo, el Buda Sakyamuni y le invitó a dar una conferencia. Sakyamuni sólo se limitó a enseñar la flor a sus discípulos sin dar ninguna explicación. Sin entender lo que el Buda quería decir sus discípulos se quedaron en silencio. Sólo el Venerable Kasyapa sonrió. Entonces el Buda Sakyamuni anunció “Mi método de iluminación es para llevar la luz a todos los rincones, ver el todo con un corazón limpio y puro. Mi camino se enseña a través de la mente, no a través de la palabra escrita, es una transmisión especial separada de las escrituras, transmitiré la mente chan a Kasyapa (Mahakashyapa).” Este método de enseñanza basado en la transmisión de mente a mente y de corazón a corazón independiente de las escrituras es único. Desde este episodio Kasyapa se convertiría en el primer patriarca del Budismo Chan (zen) por lo que el origen del chan se remonta al mismo Buda Sakyamuni.
La unidad del Dhyana (Chan) y el Kung Fu
Cuando hablamos de shaolin Chan Gong Fu hablamos de un estilo único de artes marciales que unifica el budismo chan (zen) con el kung fu y en donde mente, cuerpo y espíritu son una unidad única e inseparable. Como muchos de vosotros sabéis el Budismo Chan nace en China y el Templo Shaolin es considerado su lugar de origen aunque en la historia realmente el chan tardó cientos de años en llegar al corazón de los chinos.
El Budismo en el Templo Shaolin comienza a transmitirse desde su edificación en el 495 A.D. cuando el emperador Xiao Wen decide construir el Monasterio para el Venerable monje indio Batuo al que invita a dirigir el Templo Shaolin como Abad. Batuo enseñó el budismo theravada en el Monasterio y así lo transmitió a sus discípulos Huiguang y Sengchou.
Bodhidharma llega a China desde la India alrededor del 520 al 527 A.D. y se reúne con el Emperador Wu de la Dinastía Liang. Si bien el emperador era un ferviente simpatizante del budismo no llegó a ningún acuerdo con Bodhidharma y éste marchó cruzando el río Yangze y estableciéndose en una montaña muy cerca del Templo Shaolin. Allí se dice que meditó (desarrolló un método de enseñanza o una forma de transmitir su sabiduría) durante nueve años y que enseñó su nueva doctrina a varios discípulos, entre ellos Huike. Las enseñanzas de Bodhidharma estaban basadas en la búsqueda personal y alejadas de la adoración de estatuas. Él mantenía que los sutras eran importantes en cuanto al fomento de una base budista pero estaba en contra de la recitación constante de los mismos, por lo que hacía hincapié en la meditación sentada frente a la pared como método de autorealización y de búsqueda espiritual.
En aquel entonces el taoísmo y el confucionismo eran las filosofías predominantes en China. El Dhyana (chan – zen) hace hincapié en tener una mente despejada y en alcanzar la iluminación. En la filosofía budista, el Dhyana es el camino correcto y la práctica del Kung Fu es simplemente para cultivar la mente y para conseguir una introspección personal.
El Dhyana se basa en la meditación, rechaza el deseo de victoria de la gente y elimina las preocupaciones. La razón por la que muchos monjes han conseguido grandes logros en Kung Fu es porque el chan les permite entrenar en un estado mental de paz.
Los practicantes de Shaolin kung fu consideramos el chan (zen) como un método de autocultivación personal en donde la quietud y el movimiento son uno, donde a través de la práctica del kung fu junto con la meditación logramos una profunda concentración que nos libera de las distracciones que podemos encontrar en la vida diaria.
Ahora bien, ¿cómo practicamos el chan (zen) y cuál es su objetivo? Podemos explicar la meditación chan como una forma de quietud o calma en donde a través de su práctica logramos expulsar los obstáculos internos y las distracciones externas, y en donde al calmar el cuerpo y la mente, podemos enfocar nuestros pensamientos en algunos objetivos o propósitos específicos y reflexionar usando las teorías budistas con el fin de lograr expulsar las preocupaciones y convertir la ignorancia en sabiduría para que uno pueda ser liberado espiritualmente y así alcanzar el estado más elevado de esta práctica.
A pesar de que el método de práctica del chan difiere de otros Templos o clanes, sus bases y fundamentos budistas no son diferentes. La secta de budismo chan sienta sus bases en las enseñanzas de Buda y utiliza el chan gong fu como método de entrenamiento para la autocultivación espiritual. Este método único de práctica solamente se llevaba a cabo en el Templo Shaolin. Los monjes de la antigüedad usaban las técnicas de entrenamiento del kung fu para ejercitar su cuerpo y mente para poder soportar las largas horas de meditación.
Podemos considerar también el desarrollado del chan como una mezcla de la virtud de Confucio, la quietud Taoísta, el vacío en la filosofía budista y la doctrina china de la unidad del universo y el yo. Esta unión de filosofías o corrientes de pensamiento se ven reflejadas en una estela de piedra tallada en el Templo Shaolin y que hoy en día es uno de los símbolos del mismo templo.